
La apnea del sueño es un trastorno respiratorio frecuente, muchas veces infradiagnosticado, que puede afectar seriamente a la calidad de vida y a la salud general. Sin embargo, detectar su presencia hoy en día es más fácil, accesible y cómodo que nunca. A continuación, te explicamos algunas razones de peso para plantearte realizar una prueba del sueño.
La información es poder
Saber si tienes apnea del sueño (y de qué grado) te permite tomar decisiones. Conocer el diagnóstico es el primer paso para abordar el problema y evitar complicaciones futuras. No es lo mismo convivir con el ronquido sin saber por qué ocurre que tener un diagnóstico claro que te permita actuar.
Salir de dudas es más fácil de lo que crees
Si alguna vez te has preguntado: ¿Tendré apnea del sueño?, existe una forma muy sencilla de responder a esa pregunta. Hoy en día, gracias a los avances en tecnología médica, no es necesario pasar una noche en el hospital. Puedes hacerte un estudio del sueño desde casa, de forma cómoda, segura y precisa.
Si tienes problemas cardiovasculares, debes considerarlo
La apnea del sueño está estrechamente relacionada con hipertensión arterial, problemas cardíacos, ictus, arritmias y otras enfermedades cardiovasculares. Si ya presentas alguno de estos cuadros o tienes una hipertensión mal controlada, realizar un estudio del sueño podría aportar información clave para mejorar tu tratamiento y proteger tu salud a largo plazo.
Diagnóstico en casa: rápido, fiable y sin complicaciones
En nuestro servicio de diagnóstico domiciliario utilizamos tecnología de última generación para estudiar la calidad de tu sueño y detectar la posible presencia de apnea obstructiva. El procedimiento es rápido, económico, no invasivo y con una fiabilidad validada clínicamente. Además, nuestro equipo de especialistas se encarga de analizar los resultados y orientarte sobre los siguientes pasos, si fuera necesario.
Resumiendo…
La apnea del sueño puede pasar desapercibida durante años, pero sus efectos no lo hacen. Si sospechas que puedes padecerla, si tienes síntomas persistentes o si presentas factores de riesgo, no lo dejes pasar. Hacer una prueba del sueño es sencillo y puede marcar la diferencia en tu bienestar diario y en tu salud futura.